Homeland (temporada 8)

Impresiones: llegamos a la temporada final de Homeland. Encontramos a Carrie Mathison de nuevo en medio de la tormenta perfecta, la que se gesta en el escenario que ella mejor conoce, Oriente Medio, concretamente en Afghanistán, adonde ha vuelto tras su cautiverio ruso.

Carrie se encuentra en medio de un avispero, jugando el Gran Juego (como se lo conoció en el Siglo XIX), con lo rusos volviendo al tablero. En su afán por evitar una guerra, la agente de la CIA es manipulada por unos y por otros, hasta tal punto de que su lealtad se pone en entredicho. De hecho, evitar la guerra la hace tomar una las decisiones más duras con las que ha tenido que enfrentarse, eliminar a Saul, lo más parecido a un padre que ha tenido nunca, y pasarse al enemigo. 

La temporada final de Homeland es trepidante, llena de momentos muy de película clásica de espías. La escena final, con Carrie ya en Rusia convertida en una traidora a su país, cierra el círculo que abrió Brody en la primera temporada. Saber que en el fondo no es más que otra de sus tramas nos reconcilia con un personaje que en estos últimos capítulos llegas a odiar.

Homeland es, para mí, una serie que ocupará un sitio destacado dentro de la historia de la televisión. Una de las grandes.

Sinopsis: La temporada final de ‘Homeland’ encuentra a Carrie Mathison (Danes) recuperándose de meses de confinamiento brutal en un gulag ruso. Su cuerpo está sanando, pero su memoria sigue fracturada, lo cual es un problema para Saul (Mandy Patinkin), ahora asesor de Seguridad Nacional del recién ascendido presidente Warner (que es interpretado por ganador del Emmy y del Globo de Oro Beau Bridges). La prioridad de la nueva administración es terminar la guerra con Afganistán y envía a Saul para negociar la paz con los talibanes. Pero Kabul está repleto de señores de la guerra y mercenarios, fanáticos y espías, y Saul necesita los contactos y la experiencia que solo su protegida puede proporcionar. Contra el consejo médico, Saul le pide a Carrie que lo acompañe a la guarida del león, una última vez».

Fuente: https://www.magazinespain.com